En esta zona del barrio de Chacaica y el Camino La Menora que comunica con el barrio de la Hoya, podemos ver una de las antiguas infraestructuras relacionadas con el agua más importantes del Valle de Güímar.
En esta ruta vamos a visitar, el Molino de la Menora y Los Molinos y Lavaderos de Chacaica, catalogados como Bienes de Interés Cultural en la categoría de Sitio Etnológico.
Las aguas subterráneas de los barrancos de Badajoz y del Río se canalizaban y se conducían en dirección al centro del municipio de Güímar para las distintas necesidades de sus habitantes. Entre ellas se utilizaba en la zonas altas para mover los molinos que tenían como función el moler los cereales para el consumo humano, el agua siguiendo su recorrido abastecía a una fuente pública y a unos lavaderos unos metros más abajo.
El recorrido de la ruta para contemplar tanto los molinos, los lavaderos y chorros de agua se ha planificado de forma circular, con salida y llegada a la Plaza de la Hoya .
La distancia del recorrido es de unos 2,5 Km.
El tiempo empleado es 1:30 Horas aproximadamente.
Gran parte del recorrido es por carreteras con trafico, por lo tanto caminar por las aceras o lo mas a la derecha posible.
Lo primero que vamos a ver, pasando la Ermita de San Pedro de Arriba y la calle del agua, al llegar a la esquina de la calle Chacaica girando por la calle Nazaret, son los chorros del agua, una gran pila con cinco caños el cual uno de ellos representa una supuesta cabeza de león. Cruzando la calle tenemos que el agua ahora continúa su camino a los lavaderos compuestos por tanquillas anchas y profundas, en donde se realizaba antiguamente el lavado y secado de la ropa, estas tanquillas y los canales tenían por misión el reparto y distribución del agua en su camino ahora destinado al riego de las diferentes fincas de cultivo.
Siguiendo el recorrido por la empinada calle de Chacaica vamos viendo los diferentes molinos como podemos observar en el mapa.
El molino de Abajo que es el primero que vamos a poder ver junto a su canalización que actualmente es el mejor conservado, puesto que ha sido restaurado en fechas recientes.
Los cuatro molinos representan parte de un patrimonio cultural, y un ejemplo de que como en un tiempo no muy lejanos se aprovechaba el agua como parte de un gran desarrollo económico de toda esta comarca.
Estos molinos y sus canalizaciones conservados de una manera desigual y con una misma tipología, son claros ejemplo de los grandes trabajos que realizaban nuestros antepasados para aprovechar lo que es parte de la vida, que es el agua.
En en recorrido tenemos tanto hoteles como lugares donde probar una rica gastronomía de la zona, como son Hotel buen retiro. Casa de la música y el sonido
Como el Hotel Rural La Raya, también con su restaurante.
Vale la pena visitar estos lugares del gran historia y de gran patrimonio cultural del Valle de Güímar, concretamente en este artículo en el municipio de Güímar.
Este artículo esta escrito, diseñado y documentado por :
José Miguel Díaz Fernández.