RUTA DE SENDERISMO POR EL LITORAL DE LOS 3 MUNICIPIOS.


    ¿Quieres conocer lugares llenos de historia, paisajes con grandes vistas a la orilla del mar y contemplar una vegetación única en el mundo?. Pues aquí te presento una ruta en la que puedes visitar la Basílica de Nuestra Señora de Candelaria (Patrona de Canarias), conocer un lugar catalogado como de Bien de Interés Cultural y caminar por un mar de lava lleno de tabaibas y cardones.
   En esta ruta de 9 km. además se puede visitar los núcleos costeros de Playa de La Viuda, Playa de Lima, El Socorro y El Puertito de Güímar.



LOS AMANECERES EN EL VALLE DE GÜÍMAR.


 

    Entre el otoño y bien entrado el invierno, cuando al amanecer las nubes se colocan sobre el horizonte, podemos contemplar unas vistas impresionantes y única en esta parte de la isla de Tenerife.

   Al visitar cualquiera de estos 3 municipios, Arafo, Güímar y Candelaria, y poder contemplar estos amaneceres, tanto en la orillas de una playa o como al hacer senderismo en cualquier lugar de  las medianías, seguro que dejará un bonito recuerdo para volver otro día y seguir disfrutado de esas vistas.  



   Se tiene la gran oportunidad de estar en un espacio natural ideal para hacer reportajes fotográficos especiales.

   Aquí les muestro un pequeño muestrario de varias fotografías que he realizado, pero además de todo esto quiero invitar a todas aquellas personas que vengan y disfruten observando estos maravillosos amaneceres, uno de tantos atractivos que ofrece este Valle de Güímar.   

LA RUTA DE LOS MOLINOS Y LAVADEROS DE CHACAICA. GÜÍMAR



     En esta zona del barrio de Chacaica y el Camino La Menora que comunica con el barrio de la Hoya, podemos ver una de las antiguas infraestructuras relacionadas con el agua más importantes del Valle de Güímar.
   En esta ruta vamos a visitar, el Molino de la Menora y  Los Molinos y Lavaderos de Chacaica, catalogados como Bienes de Interés Cultural en la categoría de Sitio Etnológico.
    Las aguas subterráneas de los barrancos de Badajoz y del Río se canalizaban y se conducían en dirección al centro del municipio de Güímar para las distintas necesidades de sus habitantes. Entre ellas se utilizaba en la zonas altas para mover los molinos que tenían como función el moler los cereales para el consumo humano, el agua siguiendo su recorrido abastecía a una fuente pública y a unos lavaderos unos metros más abajo.